Su corazón, músculo indomable
se descose y se remienda
y con su cicatriz imborrable
al amor de nuevo se encomienda.
se descose y se remienda
y con su cicatriz imborrable
al amor de nuevo se encomienda.
Nunca supo vivir de otra manera
sólo supo darse al ser humano
y aún golpeado por cualquiera,
siempre tendía su otra mano.
sólo supo darse al ser humano
y aún golpeado por cualquiera,
siempre tendía su otra mano.
Muchas heridas hubo de recibir,
hoy cicatrices que le adornan
¿más que es la vida si no sufrir?
y abrir las puertas que se entornan.
hoy cicatrices que le adornan
¿más que es la vida si no sufrir?
y abrir las puertas que se entornan.
Y nunca perdió esa sonrisa,
nunca renunció al amor
que siempre regala la brisa,
antídoto vital para todo dolor.
que siempre regala la brisa,
antídoto vital para todo dolor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario